Pocos toreros cumplen sus promesas. Aunque conozco y guardo respeto eterno por dos que siempre lo han hecho.
El bambino de la voz atimbrada aseguró que cuando nuestro incipiente ganadero estuviese mejor iría a tentar.
Ese día es hoy. Me lo pierdo, pero agradezco que os acordeis de mi. Las fotos son una basura- desde el móvil y para el móvil- no así los sentimientos.
Adiós al cáncer, bienvenida la nueva Mary y la vida por delante. ¿Qué más se puede pedir?
Me alegra saber que ha ganado la batalla y ojalá la guerra. Un beso
Prometo mandarte fotos en condiciones. Fue uno de esos días para enmarcar. Campo, torería a raudales y amigos.
Joer, y yo de guardia.
gracias rosita