Resulta que Obama, el presidente 2.0, el que confiaba en los techies y las redes sociales, el que todavía tiene un CTO por nombrar, confesó que no emplea demasiado tiempo leyendo blogs. Y que tampoco les puede hacer mucho caso. Se montó el revuelo.
Comprendo, de alguna manera lo que quiere decir, pero no se puede meter todo en el mismo saco y olvidarse del nicho que se ha movido a su favor, aunque después hiciesen algo tan tradicional como ir casa por casa o una lista de llamadas por teléfono.
Ayer en Hora 25 de la Cadena SER trataron el tema. Fue interesante.
Tanto blog, tanto blog… Doña Rosa, tiene usted un limón de mi parte
Se hizo lo que se pudo.
en donde puedo consultar mas del tema