Mi familia proviene de un pueblo cuya población oscila entre los 500 y los 700 habitantes, Hinojosa de San Vicente.
Está más cerca de la sierra que del llano y la endogamia es una constante.
Hace años que tengo un hueco reservado.
Allí los apellidos están cruzados, con darse un paseo te conoces los nombre de medio pueblo.

La cruz de Jesús y la improvisada por la vida en el patinete
Los apellidos que más se repiten son Cano, Fernández, Vázquez, Jiménez, Ramón, Resino, Morales y Rayón. El orden no es por repetición, sino por puro capricho de mi memoria.
Como mi primo Pablo ya empieza a ir al cole han visto positivo que comience a aprender costumbres propias de la zona.
Como cada día, tuve un recuerdo especial para un abuelo muy especial.
Pd.: Me encanta que el Safari esté tan cerca, cualquier día nos vemos a los leones haciendo malabares con los huesos.